El futuro está en manos de los jóvenes, y su mentalidad evoluciona a pasos agigantados. Uno de los aspectos en los que se aprecia este cambio es en su actitud activa a la hora de enfrentarse al mundo laboral. Si hace un año el 39% de los jóvenes estaba dispuesto a cambiar de trabajo tras dos años, este ejercicio el porcentaje se ha elevado hasta el 55%, según la ‘Encuesta Global Millennials 2019’ elaborada por Deloitte.
Una transformación que es tenida en cuenta por las empresas, que cada vez valoran más las opiniones de esta generación. Un cambio de actitud que también se ha dado en sentido contrario, ya que cada vez son más los millenials españoles que tienen una impresión positiva de las empresas. En concreto, un 61% de los encuestados reconoce una percepción positiva de las compañías, un dato que contrasta con que solo el 37% de los encuestados a nivel global cree que los líderes empresariales tienen un impacto positivo sobre la sociedad en la que operan y un 26% afirma, además, que no confía en ellos para mejorar la sociedad.
Preocupación por la política
La política se mantiene como el aspecto que más preocupa a los menores de 35 años. El 45% de los encuestados a nivel global no confía en sus líderes poíticos, y siete de cada diez aseguran que estos anteponen sus intereses personales a los de la población que representan.
Tampoco confían mucho los jóvenes en la situación económica del país, ya que solo el 15% de los encuestados cree que mejorará durante el próximo año.
En cuanto al empleo, la mayoría de los más de 13.400 de encuestados opina que los constantes cambios en las tecnologías hará que sea cada vez más difícil cambiar de empleo. Es más, el 85% de los españoles ven con buenos ojos la realización de trabajos temporales.
Por otro lado, tanto en España como en el resto del mundo coinciden las principales preocupaciones de los jóvenes. En España, el paro y la corrupción son los temas que más inquietud provocan entre esta generación (66%).
Cambio climático
En el resto del mundo parece haber una mayor concienciación con el medio ambiente, ya que el cambio climático es la primera preocupación personal, mientras que en España cae hasta la tercera posición (25% de encuestados).
Un factor común que tienen todos los encuestados es su preocupación por la seguridad. Terrorismo, protección de datos, acoso sexual aparecen como aspectos negativos en las encuestas. El terrorismo siempre ha sido una preocupación mundial. El acoso sexual ha ido creciendo estos últimos años con los numerosos casos que se han hecho públicos tanto en España como en Europa. Pero la inseguridad que tienen los jóvenes sobre sus datos personales, ser estafados en internet u otras inquietudes relacionadas con las nuevas tecnologías es novedosa respecto a las encuestas realizadas otros años.
Por último y siguiendo con lo anterior, las redes sociales y las nuevas tecnologías parecen ser para un gran números de jóvenes más que una preocupación una parte intocable de su vida. Muestran gran dependencia de las redes sociales, internet, teléfonos móviles ya que el 41% padecería de ansiedad si estuviese dos o más días sin estar en contacto con sus redes sociales.
Por contra, el 59% asegura que sería más feliz sin estas tecnologías. Mientras que el 62% cree que en realidad causan un efecto negativo más que positivo y al 49% le gustaría dejar de usar las redes sociales completamente.